martes, 4 de diciembre de 2007

Restos de una Vida Imaginada




Unos cuantos cigarrillos prendidos en una mesa infame
Donde solo guarde dos para la mañana siguiente...

Jarras y jarras de cerveza para calmar la sed
De unos besos que jamás debieron llegar
Por que partieron una noche de invierno,
Invierno de despedidas y de finales del tiempo...

Un cenicero lleno de lágrimas y recuerdos
Que ya logre olvidar en un bar perdido en el fin del mundo...

Un celular que sonó una tarde de domingo
En que descansaba de una noche perdida
En el barrio de las perras y los amores truncados...
Un celular que dejo de sonar una noche de invierno
Cargado de frió y de miserias en las calles del fin del mundo...

Ese invierno mendigos, putas y borrachos
Morían por el frió y la soledad de sus almas...
El invierno que fuimos expulsados del paraíso
De los sueños y los amores que no mueren ni matan...
Era este invierno el mas frió que recuerdo
Y al parecer el que recuerdan todos...

Cigarrillos, cervezas y cenizas como lágrimas
Que me recuerdan cada noche que pese al frió
Y al dolor de las partidas y pese a las absurdas respuestas del tiempo
sigo aquí, camino por el frió y sigo vivo

1 comentario:

Isabeau dijo...

Tan oscuros...esa visión tuya de la vida que me asombra..como si hubieras vivido tanto..quizá así sea. Pero cuando estás conmigo eres un niño...esa dualidad me asombra...