jueves, 27 de marzo de 2008

Una Ventana Frente a la Nada


Otra imagen en una pensión de mala muerte
Con las ventanas frente al congreso
Esperando ver como pasa esa tarde
Esperando salir por un poco de ciudad
O por un pasaje de regreso a mi santiago
Media botella de güisqui y unos philips
Adornan esa tarde la mesa en la habitación
El aroma sudoroso de resaca y llantos
De la mañana que se fue hace poco
Me recuerdan las horas de la noche anterior
En que la muerte me saluda y me recuerda
Que puede que este cerca la despedida
Correr de la muerte resulta fácil en la noche
Cuando has perdido demasiado en la mañana
Y el viento del mercado y el café frente a la plaza
Te recuerdan otro error de tus entrañas
Queda poco por hacer en estas calles
Valparaíso me vuelve a dar la espalda
Y yo atraso mi regreso
Para esconder lagrimas y odios
Tengo miedo de verme perdido entre las calles
Que ya no tienen más sentido que mirarme
Recorrerlas en busca de más botellas y resacas
Otra pérdida del sentido y otro encuentro con el vació
El silencio infecundo de la nada
Susurrando a mi alma que no queda ensueño
Solo el viaje a ninguna parte
Me ayudan a dejar de recordarte
El partir en la estación de los regresos
A los brazos traicioneros que te vuelven atrapar
Dejando mi alma en medio de la nada
En esta calles tan lejanas a las tuyas y las mías
Esta ausencia de miradas de milagros y de magia
Solo sirven para ver lo absurdo de estos meses
De estos años de esperar por tus besos que se fueron
Por estos días de encerrarme entre
Humos y botellas derruidas
Entre versos que te llamaran sin tener tu nombre
De esconderte las palabras por el miedo
A la absoluta e indecible
Ausencia de tus ojos de tus sueños frente al mundo

martes, 11 de marzo de 2008

Un Bolero Miserable

Un bolero miserable a las tres AM
Me recuerda que sigo vivo entre tanta muerte
Y el humo de esta noche me hace ver
Las cosas de otra forma
Son siglos de buscar sin encontrarte
De perderme sin sentido
En el sentido del absurdo de estos años
Entre vidas que no decidí vivir
Que solo llegaron como obsequios del infierno

Donde estas cariño malo
A quien aman tus caderas
Esta noche miserable
De borrachos y perdidos
Entre bares naufragados
Sin boleros ni los humos
De tu estrecha alma delirante
De quien huyes a quien amas esta noche
Quien conoce tus sudores doloridos
De ciudades traicioneras
Como el alma infecunda y embriagada
Del oscuro poeta de tus sueños

Y me tienes entre vasos quebrajados
Y nauseabundas cenizas oxidadas
Recordando la amargura de tus labios
La infecunda tempestad de tus caderas
Y esa voz que ya he olvidado
Susurrándome al oído tus pasiones y traiciones
Mientras en esta mesa olvidada de la boite
El recuerdo del agrio sabor de tus pechos
Me perpetúa el cáncer de mis labios
Y la nostalgia por tu amor de anocheceres
Me susurra el bolero dolorido
De tu última mañana
De sonrisas y gemidos en mis brazos maltratados
Por tu alma vagabunda y traicionera