miércoles, 28 de noviembre de 2007

Ishtar y Demetrius en la Noche de los Tiempos

Bizancio mil cuatrocientos y algo años
Dos niños se esconden entre libros y pinturas
Dos pequeños niños juegan al arte de los santos
Dos almas dulces e inocentes se miran y se esconden
Dos antiguas almas inocentes se esconden y se ríen
Saben que falta poco para su partida
Saben que la próxima mañana sus cabezas y sus manos
Tendrán un alto precio a la vista del invasor

Bizancio mil cuatrocientos y algo años
Un niño toca una citara para calmar sus inquietas almas
Mientras el pinta una imagen del futuro
Uno pinta imágenes venideras y el otro sueña con melodías encontradas
Mil años más tarde por dos almas en un puerto lejano
Sus sonidos y sus imágenes sin ser presente ya existen
Ellas serán guardadas en la noche de los tiempos

Bizancio mil cuatrocientos y algo años
El lo mira con dulzura es su ultima noche en el castillo de las artes
Sabe que los turcos al amanecer querrán sus cabezas
Pero no tendrán nunca sus almas
Sus almas volverán una y otra vez en la noche de los tiempos
El le regresa las miradas dulces y extraviadas
Y aunque sabe que el teme esta partida, mas noche les aguardan


Bizancio mil cuatrocientos y algo años
Ishtar y Demetrius esperan su hora
Esperan a sus verdugos
Los turcos tienen la ciudad y Demetrius sabe
Que después de esa noche no verán la luz
Ishtar lo mira con más calma por que sabe que regresaran
Sabe que los siglos y la magia de sus vidas los esperan

Bizancio mil cuatrocientos y algo años
Ishtar y Demetrius escuchan los cascos de caballos
Que rodean las paredes del castillo de las artes
Es cosa de minutos para que todo acabe
Ishtar y Demetrius lloran su partida
Ishtar y Demetrius esperan su partida como quien espera un tren al infierno
Se abrazan con dulzura y saben que solo saben cuidarse el uno al otro
Saben que fue así saben que será así
Y saben que volverán a ser hermanos
Saben que volverán a su destino
Ishtar y Demetrius siempre regresan en la noche de los tiempos

viernes, 23 de noviembre de 2007

Las Princesas de las Piernas Infinitas




En las calles de San Antonio se teje una historia
En las balsas de los gatos y los barcos
Varados frente al muelle dolorido
Se encuentran las miradas extraviadas de los vinos y cigarrillos
La nostalgia de tiempos mejores que nunca existieron
La recobrada memoria friccionada me habla bajo
Una dolorida embarcación varada frente al muelle
Entre marineros, gatos y chorros
En medio de dos antropólogos de la nada
Se que no quedan muchos caminos
Las miserias de los cerros son testigos infinitos
De la caída de la noche

Por una calle sin nombre anochece tras la primera lluvia de invierno
Tras una calle llena de basuras y mendigos
Entro a la Reginne
Quien diablos sabe que es la Reginne
Solo una historia de marinos y putas
De mujeres y machos de una noche
Princesas y héroes desaparecidos
La mujer de turno reclama el honor entre sus piernas
Tiene la historia y la sabiduría de mil noches en sus manos
Sus pechos conocen más de macho que niños amamantando
Sus oxidadas caderas y curvas saben que aquí dentro
Los héroes las rescatan solo un par de horas
Mañana de regreso a sus casas perdidas
Nadie conoce su destino diurno
Solo el desvelado sueño nocturno de sus caderas
Nadie recordara mañana al héroe convertido en marinero.

El rescate de la Bella Durmiente Aquí duro dos horas
Y el Príncipe Azul Solo tenía dos noches y veinte lucas para el puerto
Que sabe Waltt Disney sobre la princesa de los besos a la venta
Que saben los Hermanos Warner sobre los placeres del príncipe sifílico
Que llego en un barco y no a caballo
Que saben las hadas madrinas de las princesas de las piernas infinitas
Que cuento de fínales felices me contó
De tus ligas en mis dientes y mis manos en tus entrañas alquiladas
Que poema de sutiles palabras adolescentes
Me hablo de tus labios pintados y tu perfume barato
Quien sino yo mismo con mis ojos extraviados
En tu escote y tus caderas sobreexpuestas
Conoce y habla de tus intimas mordidas
De tus desenfrenadas pasiones y gritos inventados
Quien puede hablar de esta mentira verdadera de veinte lucas y dos vinos
Que mierda sabe dios del paraíso de mis venditas putas maltratadas
Por que en la tele no exhiben tus bellezas alquiladas
Total
Veinte lucas no es mucho por dos horas de placer
Al fin de cuentas cuando ya sea mañana
Nadie sabrá de los vinos y los humos de esta noche
Nadie solo ellos los testigos de este amor de compraventa
Serán absurdos testigos esta pasión de putas y borrachos
Cuando parta el próximo barco ya no quedaran
Ni princesas ni héroes en San Antonio
La mujer de turno reclama el honor entre sus piernas
Tiene la historia y la sabiduría de mil noches en sus manos
Sus pechos conocen más de macho que niños amamantando
Sus oxidadas caderas y curvas saben que aquí dentro
Los héroes las rescatan solo un par de horas
Mañana de regreso a sus casas perdidas
Nadie conoce su destino diurno
Solo el desvelado sueño nocturno de sus caderas
Nadie recordara mañana al héroe convertido en marinero

domingo, 18 de noviembre de 2007

El Bolero de Tu Alma Dolorida




Tengo el alma añeja y dolorida
Desatada y mal herida como un Bolero
Con olor añejo e infecundo
Acoplada de nostalgia
Recargada de historias de marinos y bares
Perdidos de noches irreconciliables
Con aroma y sabor a Valparaíso
Desolado paisaje de noches perdidas entre vino y humos ajenos
Las calles y el baile antiguo dolorido se reconcilia
En medio de la bruma nocturna
Mientras prendo un cigarrillo
Camino de la calle de los amores condenados
Atardeceres rojos interminables en medio de los barcos
El muelle de las partidas jamás deja su último marino
Sin una gota del roció tardío
Jamás se surca dos veces el mismo mar sin conocer
La perdida nostalgia del amor infecundo de tu alma

Alma de bolero alma de dolor y miseria
No conocí las calles sin la luz infinita
De tu amor de glamoures traicionados
Tras las plumas marchitas de tu último amor de noche
La despedida de la maltratada diva desconocida
Amor de los pobres miserables

Ángel de las bellezas extraviadas
Valparaíso eterno
Muerte frente a la plaza victoria sin tu aroma de calles olvidadas
Cariño malo donde estas 30 años más tarde
Donde quedaron tus morenas y maquilladas pasiones doloridas
Los golpes del marino español y las desenfrenadas pasiones
Del perdido chorro del puerto amado
Donde te llevaron los golpes y las luces de la miseria
En la boite de los destierros se perdió tu último amor desquiciado

Ya sin golpes mi las luces de la boite del destierro
Se esconde la última pasión dolorida
Detrás de la barra del destierro en la habitación de los descansos
Llegamos a la espera del último bolero maltratado
La canción de las despedidas y los amores desaparecidos
En el lecho de muerte se encuentran tus bellazas
Donde llegamos donde nos encontramos
Aquí están las dulzuras de tu piel morena
Aquí te espero cariño malo.

viernes, 16 de noviembre de 2007

Las Palabras al Otro Lado del Espejo

Palabras que salen de un alma dolorida
Que parecen versos de otro tiempo
Pero que los relojes las vuelven presentes
Que el solo hecho de su honestidad la convierte
En versos infinitos que sangra tu alma
Pero son palabras, son frases que vienen de ti
Reclamando al tiempo y a ti misma por las confusiones del tiempo
Frases que nacen como versos
Al menos en el cielo de los escribidores nocturnos
Donde el lenguaje crea libertades
En las que espera despertar tu alma

Mientras la noche reclama la partida
De otro martes sangriento sin mucho sentido
Más que el silencio que acompaña este día
De pensar palabras que se esconden de silencio
Me quedo inmóvil contemplado la ciudad y sus estrellas
La ciudad de los espejos y las imágenes que en ellos me muestra
Imágenes que me recuerdan palabras
Palabras encontradas aquí y allá sin comprender
Muy bien donde provienen en verdad
Si son pronunciadas por quien las escribe o quien las lee

La noche sigue avanzando y las preguntas siguen aquí
También me continúan los silencios
Mientras me pregunto sin saber por que
Que esconde que en verdad
Si las palabras me esconden a mí dentro de ellas
O soy yo quien las esconde en mi propio interior
Pero ambas son partes de una sola realidad
Estoy aquí y estoy allá de una u otra forma
Sin duda siempre estoy a los dos lados del espejo
Tanto lo que vez como lo que aun no logras descubrir
Estoy acá y estoy allá
En las palabras que son y las que nacerán
A través del tiempo
Mientras seguimos descubriendo
Los trozos y las trizas de lo que somos
A los dos lados del espejo

lunes, 12 de noviembre de 2007

La Ciudad de los Recuerdos Perdidos



Estos días me bajo una extraña nostalgia por escuchar discos viejos, de punk rock, hardcore, industrial y dark gotick de principio de los 90, creo que parece que por unos días regrese a las 15 y recordar esa época, lo que sentía en aquellos años, como eran nuestras vidas en esos años un tanto difíciles pero cargados de dolor, desencanto por el mundo o el país que más que vivir padecíamos, creo que varios pagamos el precio de la vanguardia y a veces lo pagamos caro en verdad, el vestirnos de negro, los bototos, los ojos delineados, las cruces invertidas y el pelear por meses por conseguir un buen disco de the cure, cocteau twins, cranes o nick cave, etc., que cosas que hoy parecen relativamente fáciles, con solo un clik en la red en eso años era toda una hazaña conseguir un cassette pirata de una de esas bandas, nuestras soledades y los libros de poemas nos acompañaban, escribía poemas bastante mediocres la verdad, bueno ante los ojos de hoy, pero en esa época cada palabra se convertía en un buen panfleto para expresar lo que sentíamos muchos, bueno aquellos que nos atrevimos a cruzar el limite de lo normal o lo establecido y hacer de nuestras vidas algo más de lo que el sistema nos ofrecía o esperaba de nosotros, varios quedaron en el camino otros seguimos de otra forma pero seguimos en esto, han pasado 15 años de esto en verdad, pero al parecer me resisto a dejar el luto, a dejar la consecuencia de mis actos y de las cosas en las que sigo creyendo, la fin de cuentas las cosas no han cambiado tanto la verdad…siguen lloviéndole palos a los mismos y seguimos siendo apuntados con el dedo, por decir que algunas cosas están mal y por creer que otro mundo es posible…

Santiago inicio de los 90 o fines de los 80 las calles apestaban éramos testigos del comienzo de una frágil democracia pactada, esta no cumplía nuestros sueños ni ideales, las calles eran nuestras nuevamente, la repre seguía persiguiéndonos, estábamos apestados, el dictador ya no era el enemigo valido, el enemigo estaba afuera en todas partes, en nuestra sangre corría odio y ansias de una libertad distinta, santiago parecía una ciudad medieval llena de tribus llena de odio entre nosotros mismos, Matucana desaparecía y bella Bestia o Perra Vista y otros barrios comenzaban a ser nuestros, éramos hijos de la calle, el grunge daba sus primeros pasos y aquí todo pasaba pero a la vez nada, una ciudad llena de tribus de clanes que se odiaban entre si, la violencia era escondida, solo la repre sabia de ella, pero también nosotros, el alcohol y el rock llenaba nuestras venas como un bálsamo incansable de talento, juventud, odio, rebeldía y sueños. Eso escondían las calles eso era nuestra vida,

En medio de ese escenario virulento de pasión y miseria surgía un pequeño y extraño una banda inexistente de esas que jamás tocaron un escenario Hijos del Alcohol, el proyecto de un grupo de estudiante sin talento pero con ganas de decir y hacer de sus palabras una consigna un discurso, un panfleto antipanfletario una historia de 5 amigos de no mas de 15 años, medio borrachos con intereses disgregados y a ratos en común, pero con una sola consigna, esta sociedad apesta nuestros lideres son una mierda, y la soledad de nuestras vidas nos lleva a crear, nos lleva a decir esto es una mierda.

Que más podía hacer, un grunge un punk dos dark y un trush, sino odiar y beber para crear algo parecido a música, un panfleto con dos guitarra un bajo una batería y un cantante con voz de niño tras un sonido deprimente estruendoso gritando con rabia y melancolía sus precarios poemas. Hijos del Alcohol, no era una banda no era poesía, era todo y nada, solo 4 canciones y nunca un escenarios, jamás nadie lo nombro lo supo, solo sueño escondido en la bodega de una casa…solo el espíritu decadente de principio de los 90.

sábado, 10 de noviembre de 2007

El Desierto de los Sueños



Hace años que apareces en mis sueños
Como una certeza irreconocible en mis huesos
Como la posible rumorosa de los tiempos en mi piel
Apareces y te vas solo dejándome tus huellas y tu aroma
Venido de lugares que aun no logro descubrir
Eres como las olas de ese mar que se que me mostraras un atardecer
Lejos de los puertos de la infancia
Esos mares que aun no logro descubrir ni navegar

Llegas y te vas dejándome solo la certeza de tu existencia
Dejando solo el recuerdo de tus besos y tus caricias en mi piel
Me dejas con la duda de lo real y lo certero de tus besos
Que recuerdo por años mientras regresas nuevamente
A proteger mis noches y cuidar mis sueños truncados
Por este occidente que cada noche me duela mas
Que solo la esperanza de encontrarte me mantiene en pie
Me mantiene luchando en mi propia intifada
Por estos mundos mejores

Llegas una noche cargada con tus velos y tu magia
Me hablas y me enseñas tu paz
Cubriendo de esperanzas el futuro y los sueños
Me enseñas los secretos del tiempo
Mientras busco en tu mirada protectora
Los secretos de esos libros que se que escribiremos
Cuando el tiempo sea tiempo
Me guiaras por el desierto de tus sueños y los míos

En tus ojos y tus manos que regresan a despertarme
De las pesadillas que esconden las fracciones de mi alma
Que limpias con tu sola presencia
Esa presencia infinita que limpia el cielo y el universo
Me hablas de milagros, libros y palabras secretas
Que sin haberlas visto nunca ya las conozco y las entiendo

En los sueños que te traen desde lejos
En que me dices que me esperas y que buscas también mis pasos
Me acaricias me consuelas y entregas la paz a mis despertares
Con el sabor de tus caderas y la dulzura de tus pechos
Me enseñas los secretos y los aromas de tu piel
Enseñándome en susurros que salen como cantos de tu boca
Los propios secretos de mi piel
Me proteges con tus entrañas de las traiciones
De los ojos y las mentiras del occidente
Me cantas canciones que se mesen como inmensas dunas de cristal

Despertare mañana nuevamente
Y recordare tus palabras susurradas al oído
Amaneceré buscándote entre los recuerdos de mis sueños
Con esas marcas que dejaste esta infinita noche en mi piel
Recordare por el tiempo que regreses
O el tiempo que nos diga el universo
En que estemos en medio de calles sin nombre
O desiertos infinitos protegiendo nuestras almas
Sentiré el sabor de tus entrañas y tú recordaras y al fin sentirás
El sabor y el aroma de de mis manos y mis labios en tu piel
Después de todos estos años de soñarnos y buscarnos solo con la magia de los tiempos
Mientras sople el viento norte en medio de un desierto
Donde no llega ese rumor de espuma que el viento mecía

En la duna en que te amé y te volveré a amar una noche azul.

jueves, 8 de noviembre de 2007

Un Palacio en el Infierno

La ultima botella de vodka en la mesa del comedor
Ya no quedan más que dos cigarrillos
Y la última línea se fue con la noche anterior
Se fue como las rizas de la chica que llego esa noche
Al departamento de los olvidos
Y que partió del cielo inventando por las luces y el dolor
Al acabar la ultima línea y el último suspiro de amor
Que guardaba tan dolorida alma
Dolor y amor por las luces de la vida perdida y encontrada
Perdida entre bares y traficantes de almas
Que te cojen los bolsillos y la esperanza
Encontrada entre putas y mendigos que siempre desprecio

El medio día de esa noche interminable
Le trajo como regalos del cielo extraviados
El recuerdo de las ultimas diez mil noches
De los últimos años en su paraíso artificial
Ya no quedan billetes ni papeles en su billetera
Ya no quedan meses extras en su paraíso artificial
Ya no quedan referentes donde acudir
Por más líneas ni botellas a medio llenar
Ni tampoco veinte lucas para encontrar besos alquilados
Ya no quedan prestamistas que quieran alquilar su alma
Ni un teléfono donde llamar quien lo venga a rescatar
Esta solo y sabe que ya nadie acudirá

El talento del artista de las redes cibernéticas
De los falsos paraísos virtuales
Sabe que perdió el talento entre polvos y botellas de vodka
La última gota de talento se le llevo la noche anterior
La negociar el polvo con la chica del bar.
La ultima esperanza de sus sueños
Se la llevo la mujer de los ojos de cristal y alcohol
Y las trizas de alma que guardaba
Como milagro por si lograba despertar de su propia soledad
Partieron esa mañana al ver los cigarrillos y el café del atardecer
Para descubrir esa tarde sin sol en la ciudad
Que ya ni siquiera le queda su perdida soledad

Son las siete y solo queda un cigarrillo y el desvelo de su soledad
Tal vez en una calle logre vender más que fe y mentiras
Tal vez el cuadro que dejo su ultimo amor en el paraíso
Donde sabe que ya no regresara
Le de un par de líneas o con suerte algo mas
Tal vez encuentre en los mendigos y las putas que desprecia
Alguna línea un beso o un trago no de amor sino de caridad
Sabe que si este plan falla ya no tendrá donde ir
Y ya no hay donde regresar
Si esto falla encontrara solo una respuesta más
Encerrado en el departamento de los olvidos
Con la última línea sin esperanza llegara su final

miércoles, 7 de noviembre de 2007

El Parque de la Soledad


Salio esa noche como de costumbre a caminar por el parque de las desesperaciones, prendió un cigarrillo y puso lo habitual en el ipod, miro a los borrachos, a las personas que pasaban en medio de los senderos de pasto, vio a los chicos y a las mujeres de la calle de enfrente, pensó en las noche que llevaba mirando a la misma mujer sin decir una sola palabra, ella también lo miraba y a ratos sonreía, para el era extraño que una chica con esa delicadeza estuviera ahí en ese lugar y para ella era extraño que ese hombre de semblante diferente como arrancado de otro mundo estuviera ahí, con ese aspecto de esperar algo, pero también tenia miedo de acercarse y preguntarle, por miedo de dejar de sentir lo que le recordaba esa silueta pálida y esos ojos extraviados que a ratos la miraban.


Pero esa noche algo cambiaría, una de las mujeres del parque se le acerca a pedirle un cigarrillo de forma agresiva, sacándolo de su concentrada y etérea soledad de siempre, el no sabe que hacer y se lo entrega e intenta prenderlo, pero la mujer empieza a maldecirlo sin explicación, es que parecer un extraño en la ciudad del tiempo siempre es peligroso, pero en eso algo lo salva de su temor, la chica llega a su lado y corre a la otra mujer, el no entiende nada, solo que ahora se siente a salvo y con un poco de paz.

La queda mirando y le agradece con un gesto y con sus pálidos ojos clavados en los de ella, ella lo mira con la misma dulzura del recuerdo que sentía al verlo todas estas noches, el piensa en invitarle un café pero teme, ella piensa en hablar un poco con el pero teme. Se miran y se despiden solo con un gesto, el camina de regreso a su departamento y ella de regreso a la calle de enfrente, ambos con la misma sensación y el mismo miedo y la misma pregunta los envuelve…que ganas de haber tenido el valor de abrazarte, que ganas de haber sentido el dulce refugio de tus brazos.