lunes, 12 de noviembre de 2007

La Ciudad de los Recuerdos Perdidos



Estos días me bajo una extraña nostalgia por escuchar discos viejos, de punk rock, hardcore, industrial y dark gotick de principio de los 90, creo que parece que por unos días regrese a las 15 y recordar esa época, lo que sentía en aquellos años, como eran nuestras vidas en esos años un tanto difíciles pero cargados de dolor, desencanto por el mundo o el país que más que vivir padecíamos, creo que varios pagamos el precio de la vanguardia y a veces lo pagamos caro en verdad, el vestirnos de negro, los bototos, los ojos delineados, las cruces invertidas y el pelear por meses por conseguir un buen disco de the cure, cocteau twins, cranes o nick cave, etc., que cosas que hoy parecen relativamente fáciles, con solo un clik en la red en eso años era toda una hazaña conseguir un cassette pirata de una de esas bandas, nuestras soledades y los libros de poemas nos acompañaban, escribía poemas bastante mediocres la verdad, bueno ante los ojos de hoy, pero en esa época cada palabra se convertía en un buen panfleto para expresar lo que sentíamos muchos, bueno aquellos que nos atrevimos a cruzar el limite de lo normal o lo establecido y hacer de nuestras vidas algo más de lo que el sistema nos ofrecía o esperaba de nosotros, varios quedaron en el camino otros seguimos de otra forma pero seguimos en esto, han pasado 15 años de esto en verdad, pero al parecer me resisto a dejar el luto, a dejar la consecuencia de mis actos y de las cosas en las que sigo creyendo, la fin de cuentas las cosas no han cambiado tanto la verdad…siguen lloviéndole palos a los mismos y seguimos siendo apuntados con el dedo, por decir que algunas cosas están mal y por creer que otro mundo es posible…

Santiago inicio de los 90 o fines de los 80 las calles apestaban éramos testigos del comienzo de una frágil democracia pactada, esta no cumplía nuestros sueños ni ideales, las calles eran nuestras nuevamente, la repre seguía persiguiéndonos, estábamos apestados, el dictador ya no era el enemigo valido, el enemigo estaba afuera en todas partes, en nuestra sangre corría odio y ansias de una libertad distinta, santiago parecía una ciudad medieval llena de tribus llena de odio entre nosotros mismos, Matucana desaparecía y bella Bestia o Perra Vista y otros barrios comenzaban a ser nuestros, éramos hijos de la calle, el grunge daba sus primeros pasos y aquí todo pasaba pero a la vez nada, una ciudad llena de tribus de clanes que se odiaban entre si, la violencia era escondida, solo la repre sabia de ella, pero también nosotros, el alcohol y el rock llenaba nuestras venas como un bálsamo incansable de talento, juventud, odio, rebeldía y sueños. Eso escondían las calles eso era nuestra vida,

En medio de ese escenario virulento de pasión y miseria surgía un pequeño y extraño una banda inexistente de esas que jamás tocaron un escenario Hijos del Alcohol, el proyecto de un grupo de estudiante sin talento pero con ganas de decir y hacer de sus palabras una consigna un discurso, un panfleto antipanfletario una historia de 5 amigos de no mas de 15 años, medio borrachos con intereses disgregados y a ratos en común, pero con una sola consigna, esta sociedad apesta nuestros lideres son una mierda, y la soledad de nuestras vidas nos lleva a crear, nos lleva a decir esto es una mierda.

Que más podía hacer, un grunge un punk dos dark y un trush, sino odiar y beber para crear algo parecido a música, un panfleto con dos guitarra un bajo una batería y un cantante con voz de niño tras un sonido deprimente estruendoso gritando con rabia y melancolía sus precarios poemas. Hijos del Alcohol, no era una banda no era poesía, era todo y nada, solo 4 canciones y nunca un escenarios, jamás nadie lo nombro lo supo, solo sueño escondido en la bodega de una casa…solo el espíritu decadente de principio de los 90.

1 comentario:

Anónimo dijo...

parece que a mi vida le guataria vivir la suya un rato...

complejo ¿no?